Ha sido un año duro, complicado, triste, digamos que ha sido bastante desconsiderado, pero por otra parte he vivido los momentos más felices en él.
Debo dar las gracias a tanta gente que aquí os aburriría.
Mis amigos, son sencillamente los que mejor me entienden, los que me sacan una sonrisa en cualquier momento y un año más han estado ahí demostrándome todo lo que valen.
Mis pequehooligans, con las que he aprendido que no hay nada mejor que un autobús y su compañía para divertirse.
Mi mejor amigo, que es maravilloso, no sabeis cuanto. Él, Miguel, Tulio y yo.
Mi tándem, ya sabes, eso no lo puede conducir solo uno. Zipi no puede ser feliz sin zape.
Y en general toda mi familia que es la mehó.
Mis focas mórbidas, Irlanda sin ellas no es ni la mitad de feliz.
Él. El mismo que ha conseguido hacerme feliz día a día.
Tras esto, que ya se que no es mi estilo, tengo que agradecer a todo el mundo que ha estado a mi lado en los peores momentos, estando de verdad.
Y bueno, que sé que donde quiera que esteis, vosotros también me hacer del 2013 un gran año. Con que sea un pelín mejor que este me conformo, no pido más.
HASTA NUNCA 2012.